Es evidente que para nosotros la disciplina es un medio. Es la condición indispensable para poder desarrollar un trabajo fructífero. Las normas deben tender a la autodisciplina.
No pretende, en modo alguno, restringir la libertad de los alumnos o condicionarla a determinados patrones de conducta, pretende orientarlos para que descubran la importancia de desarrollar una autodisciplina; la autodisciplina permite el sano desarrollo de las facultades intelectuales, sociales, personales y espirituales.